viernes, junio 20, 2008

¿Qué vale más?

La ponderación de los torneos.
La eterna discusión: ¿Copa Libertadores o Torneo Local?
¿Hay algún criterio para determinar qué competencia es más importante o cuál tiene mayor trascendencia para jugadores, dirigentes y simpatizantes?
De antemano la respuesta es negativa, ya que en el fútbol los torneos valen por sí solos, es decir, por unidad obtenida, y no se convierten en sistemas de puntaje, ni se computan en un ranking.

Ahora bien, la práctica demuestra lo contrario, toda vez que los clubes de nuestro país destinan mayor parte de sus recursos y esfuerzos para tomar parte en los torneos continentales, lo que denota a las claras la menor que el campeonato doméstico no los seduce, por lo menos como primera opción.
Ya en el marco de la disputa de una copa internacional, los equipos considerados no grandes, optan claramente por ésta en desmedro del campeonato argentino, lo que trae aparejado grandes posibilidades de ulteriores inconvenientes con el promedio – como recientemente le sucedió Central, Newells, Gimnasia-. Este es el primer aspecto que le quita valor al cuestionado certamen, en tanto el margen de competición se reduce notablemente. El ejercicio de esta opción, demuestra claramente una ponderación entre las dos competiciones, priorizándose una, y colocándose a la restante en segundo lugar.
En el caso de los denominados “poderosos” el caso es distinto, de antemano se plantea la posibilidad de luchar por los dos frentes, pero en determinado momento la ya mencionada opción debe ejercerse, y el resultado es el mismo, Ezeiza resulta más seductor que aeroparque. Esto se ve reflejado en la segunda mitad del torneo local, momento que coincide con el inicio de las etapas decisivas de los trofeos internacionales, oportunidad en la cual los clubes ponen en cancha a los equipos considerados B, integrados en su mayoría por juveniles o suplentes del equipo habitualmente titular.
Ello así, el panorama a estas alturas sería el siguiente: equipos que pelean el descenso, equipos que ya quedaron eliminados de las competencias extranjeras y por el ya mencionado descuido del torneo local no son competencia, y equipos que aún continúan disputando una copa y centran todo su poderío en ella.
En este contexto, parecería que a nadie le interesaría el certamen doméstico, en virtud de que, algunos eligieron apuntar sus cañones a otro torneo, y otros no cuentan con los elementos necesarios para intentar obtenerlo.
Esta argumentación es puesta en jaque con facilidad. En los últimos tiempos se ha visto claramente como se revoca la opción ejercida previamente y se intenta volver sobre los pasos, reciclando al despreciado torneo, invistiéndolo de una importancia que nunca tuvo.
El caso paradigmático es el de River. El club de Nuñez es el ejemplo perfecto para graficar lo expuesto. Mientras está la chance de elegir, hinchas, dirigentes y jugadores optan por la competición internacional, pero una vez consumado el fracaso, retoman el camino abandonado y buscan la obtención del premio consuelo, el que una vez obtenido, se festeja grandilocuentemente, olvidando su naturaleza y entidad.
Hasta el Lanús campeón de Ramón Cabrero reafirmó el carácter subsidiario que posee el campeonato local, ya que en dicha oportunidad, el club del Sur priorizó claramente la Copa Sudamericana, destinando lo mejor de su plantel profesional para ello. Una vez acaecida la eliminación de la misma, retomó la senda y se volcó hacia el descalificado certamen.
Las reiteradas consagraciones internacionales de Boca implicaron que este club descuidara el torneo local, perdiendo así este, un competidor de jerarquía y candidato natural a coronarse. La estadística refleja (boca campeón de la libertadores y quién salió campeón en ese torneo).
Resulta claro entonces, que si bien existe una valoración de antemano de los diferentes torneos, al momento de escoger uno, la elección siempre tiene como resultado la competencia foránea. ¿Qué factores motivan dicha decisión?
La gloria, la “vidriera”, la dificultad que presenta jugar contra los mejor equipos de los diferentes países, los largos trayectos que hay que recorrer, el reconocimiento internacional, los premios repartidos, etc. La copa libertadores no vale por cuatro clausuras, pero se festeja el doble por todos los motivos referidos.
En estas líneas no se intenta descalificar al campeonato argentino, sino que se busca otorgarle coherencia a la conducta de los agentes del fútbol, lo que en estos tiempos resulta una utopía. Es cierto que forma parte del folclore habitual, irracional y arbitrario y erradicarlo sería quitar parte de la esencia de este fútbol actual. Empero, lo que no es admisible, es este cambio de discurso y operación mediática por parte de los dirigentes y técnicos, para revalidar procesos, realizar maniobras electorales, justificar las inversiones y decisiones equivocadas. No se le puede exigir un actuar racional al simpatizante, pero si al dirigente que empapela la ciudad con afiches y olvida que durante su mandato, el club sólo disputó una final de la Sudamericana y una Semifinal de Libertadores y en ambos casos, resultó derrotado.
Quien puede lo más, puede lo menos. Se entiende que el campeón del mundo, o el campeón de América, es ampliamente superior al campeón local, pero que, por una imposibilidad física, temporal y espacial, no pudo disputar el torneo local, cediendo así su lugar al campeón doméstico de turno.

martes, junio 10, 2008

Primera impresión

La competencia más trascendente a nivel selecciones del año ha iniciado. Con la victoria de Suecia por 2 a 0 sobre Grecia, campeón de la última edición, ha finalizado la primera fecha de la Eurocopa edición `08 con sede en Suiza y Austria.
Si bien es pronto para hablar de candidatos, fracasos y revelaciones, es posible delinear el porvenir de cada seleccionado, acorde al rendimiento mostrado en la jornada inicial.
Alemania, Holanda y España han sido las de mejor rendimiento. Con goles de Podolski, polaco de nacimiento, el conjunto germano su quedó con la victoria. Respecto de la alineación utilizada en la era Klinsmann, han habido pequeños retoques. Lahm se paró como lateral derecho y Mario Gomez ocupó el lugar en la delantera que Podolski dejó para hacerse del andaribel izquierdo. Su aporte desde atrás fue determinante para llegar a posiciones de gol con poca marca; parece retomar su verdadero nivel luego de la merma en su rendimiento post Mundial.
Los dirigidos por Van Basten derrotaron categóricamente a Italia, actual campeón del mundo. Más allá de la legitimidad del gol de Van Nistelrooy que abrió el marcador y cambió el desarrollo del encuentro, fue determinante el bloqueo que realizó el seleccionado oranje sobre el cerebro de su rival: Andrea Pirlo. Jamás lo dejaron recibir libre, por lo que nunca pudo herirlos con sus pases en profundidad. A su vez, Di Natale y Camoranesi, quienes debían desbordar por las bandas, fueron intracendentes.
Sneijder y Van der Vaart fueron los puntos altos del vencedor.
Por su parte España derrotó a Rusia, con tres goles de Villa, quién se mostró contundente e indomable, moviéndose por todo el frente de ataque. Si bien no marcó, fue clave el aporte de Torres, quién acumuló marcas y permitió al mancho marcar su tripleta. Las críticas a las decisiones de Luis Aragonés, dejándo fuera del once titular a Cesc, así como la auscencia de Raúl en la delegación, forman parte del pasado al consumarse la victoria. Rusia demostró estar un escalón debajo del vencedor.
Francia e Italia han tenido actuaciones para olvidar. Los galos no pudieron superar a Rumania, a raíz de su incapacidad para vulnerar el sistema táctico planteado por su rival. Poco de Ribery y Malouda, responsables de la creación de los dirigidos por Domenech. Se notó la ausencia de Viera y Henry en la formación titular. Italia deberá ganar los dos encuentros que le restan para pasar de ronda, lo cual implica que uno de los dos finalistas de la última Copa del Mundo pasará a la próxima ronda, debiendo enfrentarse entre ellos en el último partido del grupo. Para superar situaciones como la descripta es necesaria gente de experiencia como Del Piero en el once titular, por más que Donadoni respete a los hombres que clasificaron a la azzura a la competencia.
A pesar de haber ganado, República Checa y Croacia han desconcertado. El debut las enfrentó con las organizadoras, Suiza y Austria respectivamente, las más débiles en el certamen junto con Polonia y Rusia. Las ausencias de Rosisky, Nedved y Poborsky en el conjunto de Bruckner diluyen sus posibilidades de arribar lejos en la competencia. Croacia no mostró un estilo de juego definido, ocupando bien los espacios pero sin atacar a su rival.
Apenas ocho partidos se han disputado. No hay nada escrito; todos tienen posibilidades. Sin embargo se van marcando ciertas tendencias. Veremos si alguien las rompe o si se mantiene la primera impresión.